Mariano

¡Hola! Mi nombre es Mariano y quiero compartir mi historia contigo. Cuando era pequeño, mi mamá notó que yo veía el mundo un poco diferente a los demás niños. Mientras ellos jugaban con juguetes o hacían ruido, yo solía perderme en mis pensamientos, viendo formas y colores en mi mente. Mi mamá tiene una intuición increíble. Un día, me llevó a ver a unos especialistas y nos dijeron que tenía autismo. En lugar de preocuparme, pude ver cuánto mi mamá quería ayudarme y eso me hizo sentir seguro y querido.

Con el amor como mi luz guía, mis padres se aseguraron de que recibiera el apoyo que necesitaba. Me encontraron programas de educación especial que me ayudaron a aprender a mi manera. Pude explorar la terapia artística, ¡lo que me abrió un mundo completamente nuevo! Me encantaba expresarme a través de colores y formas. También hicimos terapia de comunicación, lo que me ayudó a aprender a compartir mis sentimientos y conectarme con la gente. Una de mis terapias favoritas fue la terapia con caballos: pude pasar tiempo con estos gentiles gigantes y me hicieron sentir tranquilo y comprendido. Con el tiempo, sentí que estaba creciendo, que mi arte finalmente podía escapar de mi mente y tomar forma en el papel y en mi pizarrón.

Un día, mi familia tuvo una idea brillante. Vieron cuánto me encantaba crear y querían compartir mi arte con los demás. Entonces, ¡comenzamos a hacer camisetas con mis diseños! Cada camiseta era como un pedazo de mi corazón. Estas camisetas no solo me ayudaron a conectarme con otras personas, sino que también recaudaron dinero para mi educación y terapia. Fue increíble ver a otras personas usando mi arte, sabiendo que me estaba ayudando a crecer y mejorar mis habilidades. Mi viaje recién está comenzando, pero estoy emocionada de seguir creando e inspirando a otros a abrazar su singularidad, ¡tal como mis maravillosos padres me alentaron a hacer!